Después de rezar el ángelus el Papa recordó que ayer en Codrongianos (Cerdeña) fue proclamada beata Elisabetta Sanna (1788-1857), natural de esa isla italiana, madre de familia, que después de enviudar se dedicó totalmente al servicio de los enfermos y los pobres y cuyo testimonio es modelo de caridad evangélica animada por la fe.

Asimismo  mencionó que hoy, en Génova finaliza el Congreso Eucarístico Nacional Italiano y tras saludar a todos sus participantes manifestó el deseo de que este evento de gracia “renueve en el pueblo italiano la fe en el santísimo Sacramento de la Eucaristía, en cual adoramos a Cristo fuente de vida y de esperanza para todo ser humano”

El próximo martes, 20 de septiembre el Papa irá a Asís, con motivo del Encuentro de oración por la Paz, 30 años después del histórico Encuentro convocado por San Juan Pablo II y por eso invitó a las parroquias, las asociaciones eclesiales y a  los fieles de todo el mundo a vivir ese día como una Jornada de oración por la paz. “Hoy más que nunca –dijo- necesitamos paz en esta guerra difusa en todo el mundo. Oremos por la paz. Siguiendo el ejemplo de san Francisco, hombre de fraternidad y de mansedumbre, estamos todos llamados a ofrecer al mundo un fuerte testimonio de nuestro compromiso común por la paz y la reconciliación entre los pueblos. Así el martes, todos unidos en oración: que cada uno tome unos momentos, los que pueda, para rezar por la paz. Todo el mundo unido”.