En el avión que esta mañana le llevaba a Budapest y Eslovaquia para su 34º Viaje Apostólico Internacional, el Santo Padre Francisco, como es habitual, se dirigió a saludar a los trabajadores de los medios de comunicación que le acompañaban en el vuelo papal.
Tras el saludo del director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, el Papa dirigió las siguientes palabras a los periodistas:
Palabras del Santo Padre
Bruni
Buenos días a todos. Buenos días, Santo Padre.
Papa
Buenos días a todos.
Bruni
Creo que comparto el pensamiento de todos al decir que estamos contentos y agradecidos de verle. Somos setenta y ocho periodistas y trabajadores de los medios de comunicación, ocho de ellos de los países a los que vamos, cinco de Hungría y tres de Eslovaquia. Gracias, Santo Padre, por este saludo y por las palabras que nos dirigirá.
Papa
Buenos días. Gracias por la compañía. Este vuelo tiene algo de despedida, porque el maestro de ceremonias nos deja: es su último viaje, porque se ha convertido en obispo. Luego nos deja al "dictador de turno" [se vuelve y mira sonriente al obispo Datonou]. Es bueno... él también ha sido nombrado obispo y deja el lugar a un Monseñor, George es su nombre, de la India [Monseñor George Jacob Koovakad]: siempre sonríe, siempre. Será "un dictador con sonrisa". Alitalia nos deja... Tantas despedidas, pero retomamos nuestros viajes y esto es algo muy importante, porque vamos a llevar la palabra y el saludo a tanta gente.
Gracias por venir, gracias Monseñor Dieudonné, gracias Monseñor Giorgio, el "dictador sonriente". Gracias Monseñor Marini, gracias a todos y gracias a Alitalia que nos ha traído hasta aquí. Hoy no hay decana, tampoco en este vuelo está Valentina [Alazraki], pero está [Philip] Pullella, creo: ahí está, puedo ver la pista de aterrizaje [señala la cabeza de Pullella].
Seguimos adelante, recordando siempre a los que no están en el vuelo porque son nuestros compañeros. Ahora voy a pasar a saludar, con un poco de prisa porque hay poco tiempo. Gracias.