Recibimiento oficial en el aeropuerto internacional de Dublín

El avión que transportaba al Santo Padre Francisco, salió esta mañana de Roma a las 8.30 am, y aterrizó a las 10.25 hora local (11.25 horas en Roma) en el Aeropuerto Internacional de Dublín.

A su llegada, el Papa fue recibido por el viceprimer ministro, Simon Coveney, y por dos niños que le ofrecieron ramos de flores . También estaban presentes los cardenales Kevin Joseph Farrell, prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, y Seán Baptis Brady, arzobispo emérito de Armagh; S. E. Mons. Eamon Martin, arzobispo de Armagh, Primado de toda Irlanda y presidente de la Conferencia Episcopal de Irlanda; S. E. Mons. Diarmuid Martin, arzobispo de Dublín y Primado de Irlanda; S. E. Mons. Michael Neary, arzobispo de Tuam; S. E. Mons. Kieran O'Reilly, S.M.A., arzobispo de Cashel y Emly; Su Gracia Michael Jackson, arzobispo anglicano de Dublín y una familia.

Al final del recibimiento oficial el Papa se trasladó a Áras an Uachtaráin, la Residencia Presidencial de Irlanda, ubicada en Phoenix Park, al norte de Dublín.


Ceremonia de bienvenida y visita de cortesía al Presidente de la República de Irlanda en la Residencia Presidencial

A su llegada a la residencia presidencial irlandesa, a las 11.20 hora local (12.20 horas en Roma), el Presidente de la República de Irlanda, Michael D. Higgins, y su esposa dieron la bienvenida en la entrada principal al Papa Francisco. Luego tuvo lugar la ceremonia de bienvenida con la ejecución de himnos y honores militares.

A las 11:30 en la State Appointmente Room se procedió a la Firma del Libro de Honor y la presentación de las Delegaciones.

Sucesivamente, el Santo Padre y el Presidente se trasladaron a la contigua Reception Room para la reunión privada, que duró unos 15 minutos, y la presentación de la familia.

Al final del encuentro el Presidente acompañó al Papa al jardín de la Residencia, donde el Santo Padre plantó un árbol.

Por último, el Papa Francisco dejó la residencia presidencial y se desplazó al castillo de Dublín para encontrarse con las autoridades, la sociedad civil y el cuerpo diplomático.