Como es habitual en el vuelo hacia Polonia el Papa Francisco departió con los periodistas que lo acompañaban en el avión, más de 70, procedentes de 15 países. Haciéndose portavoz de ellos, el Padre Federico Lombardi, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, dijo al Pontífice:
“Estamos viviendo unos días que nos emocionan a todos, como sabemos, por lo que está sucediendo en el mundo, por lo que sucedió ayer; y entonces, le estaríamos agradecidos si, antes de saludarnos personalmente, nos dijese una palabra sobre cómo vive usted este momento, y cómo se prepara para encontrar a los jóvenes del mundo en esta situación. Gracias Santo Padre”.
“Buenos días, y gracias por vuestro trabajo –respondió el Papa- Una palabra que ‒sobre esto que decía el Padre Lombardi‒ se repite mucho es «inseguridad». Pero la verdadera palabra es «guerra». Desde hace tiempo decimos: «El mundo está en una guerra a trozos». Esta es una guerra. Estuvo aquella del 14, con sus métodos; después aquella del 39 – 45, otra gran guerra en el mundo; y ahora ésta. No es tanto orgánica, seguramente; organizada, sí, pero orgánica… digo… Pero es guerra. Este santo sacerdote, que ha muerto precisamente en el momento en el que ofrecía la oración por toda la Iglesia, es uno; pero cuántos cristianos, cuántos inocentes, cuántos niños… Pensemos en Nigeria, por ejemplo. «Pero eso es África…». Es guerra. No tenemos miedo de decir esta verdad: el mundo está en guerra porque ha perdido la paz.
Muchas gracias por vuestro trabajo en esta Jornada de la Juventud. La juventud siempre nos habla de esperanza. Esperemos que los jóvenes nos digan algo que nos dé un poco más de esperanza en este momento.
Por lo ocurrido ayer, yo quisiera dar las gracias a todos aquellos que se han hecho presente con su pésame, en modo especial, al Presidente de Francia, que ha querido comunicarse conmigo telefónicamente, como un hermano. Se lo agradezco.”
Después añadió “Quisiera decir una sola palabra para clarificar. Cuando yo hablo de guerra, hablo de guerra en serio, no de una guerra de religión, no. Hay una guerra de intereses, hay una guerra por el dinero, hay una guerra por los recursos naturales, hay una guerra por el dominio de los pueblos: esta es la guerra. Alguno puede pensar: «está hablando de guerra de religión». No. Todas las religiones queremos la paz. La guerra la quieren los otros. ¿Comprendido?”.