Muchas gracias por lo que hacen. Ocuparse de los ancianos es asumir una herencia. Y esa herencia, entregarla. Por eso, la otra punta son los niños. Gozaba recién viendo con qué gozo este chupaba el biberón. Una promesa. Herencia y promesa. Y nosotros somos puente.

Agradezco tanto a todos los que colaboran en este proyecto. Cuando el doctor Beldra leía la lista, parecía la guía telefónica porque todo el mundo había colaborado en eso, y me ha alegrado tanto. Universalidad en la colaboración.

Esas dos cosas quisiera hoy marcarlas: herencia y futuro, ancianos y niños; tenemos que hacernos cargo de los dos porque la historia sigue. Y después, universalidad en la colaboración de todos.

Muchas gracias por todo lo que hacen, y recen por mí, ¡a favor!