Home   Historia   Museo Histórico   Archivo Histórico   Capilla Musical   Cabildo Liberiano   Asociaciones Vida Litúrgica   Oratorio
 San Andrés en el Celio
  Oratorio
 
  Photogallery


 
 IGLESIA DE SAN ANDRÉS EN EL CELIO

 ORATORIOS DE SANTA BÁRBARA Y SANTA SILVIA EN EL CELIO
 

En el extraordinario y sugestivo encuentro entre las colinas Palatino y Celio, a menos de trescientos metros del Coliseo por un lado, y del Circo Máximo por el otro, se levanta, junto a la Basílica de San Gregorio Magno, la antigua Capilla de San Andrés con sus dos espléndidos Oratorios de Santa Bárbara y de Santa Silvia en el Celio. Es un magnífico complejo monumental, antigua posesión de la Patriarcal Basílica de Santa María la Mayor, que constituye una unidad histórica rica de elementos que, además de elevar el espíritu y la atención de los expertos de historia y de los apasionados de arte, pone al visitante en un estado de serena y relajada reflexión sacándolo de la vida agitada y frenética de la ciudad. En este panorama, que ha llegado hasta nuestros días gracias a la voluntad y a las obras de ilustres personajes del pasado como los cardenales Cesare Baronio y Scipione Borghese, por citar sólo algunos, señorea incontrastable la presencia fascinante y paterna del papa Gregorio Magno.

Todo en el Celio pertenece a una dimensión que como  por encanto se aleja de la ajetreada y frenética vida de Roma. El visitante que pasa la verja se encuentra de pronto en una realidad que, ya sea por la sugestión del lugar, ya sea por el contacto con una naturaleza impensable en el centro de la ciudad, lleva inconscientemente a alejarse del mundo.

La disposición unitaria del conjunto es obra del excelente arquitecto Flaminio Ponzio. Pese a las dificultades que encontró para uniformar las preexistentes estructuras, Ponzio logró proyectar con magistral pericia este conjunto que en el siglo XVII fue definido, con razón, por el padre Mini el “hermoso teatro armónico” (Historia del Sacro Eremo). Resulta muy eficaz, en el contexto, la armonización de los elementos: dos oratorios laterales unidos a la Capilla central por un característico pórtico con cuatro columnas de mármol cipolino recuperadas del Oratorio de Santa Bárbara.

El Oratorio más antiguo es el del Triclinium, que el cardenal Baronio dedicó a Santa Bárbara. En la pared del fondo se halla la escultura del papa Gregorio Magno que bendice, realizada por Nicolás Cordier. En el centro de la sala podemos ver la mesa de mármol blanco en la que san Gregorio y su madre santa Silvia ofrecían todos los días una comida a doce pobres.

El segundo local que forma el “hermoso teatro armónico” es la Iglesia de San Andrés apóstol. Según una antigua tradición, que se basa en hallazgos y testimonios arquitectónicos, es el primer lugar de culto creado por san Gregorio en la que había sido su casa paterna. De la época medieval quedan algunos frescos (no visibles) situados entre las vertientes del tejado y el techo.

El interior de la iglesia es un simple local rectangular sin ábside, adornado con un techo de madera artesonado en cuyo centro se encuentra el escudo de armas de la familia Borghese. En las paredes laterales hay dos frescos de Guido Reni y de Domenichino, que representan algunos momentos del martirio del apóstol san Andrés. El retablo del altar es de Pomarancio, mientras que las figuras a los lados de la puerta de entrada son de Giovanni Lanfranco.
Dice la tradición que un día se presentó un tercer comensal: se trataba de un  ángel. Acontecimiento que nos propone como tema predominante el pintor Antonio Viviani (llamado el Sordo de Urbino) en el ciclo de frescos presentes en el Oratorio.

El último que fue edificado, en posición simétrica al de Santa Bárbara, es el Oratorio de Santa Silvia. Podemos ver en su interior, dentro de un nicho de forma clásica, la estatua de Santa Silvia orante, esculpida por Cordier; y en la bóveda del ábside un fresco de Guido Reni que representa un Coro y concierto de ángeles dominado por la aparición de Dios Padre.

Detrás de la iglesia de San Andrés, en el lado que da hacia el Clivo de Scauro, se pueden admirar los restos arqueológicos de una estructura que los mayores estudiosos y expertos del sector identifican como el Aula absidal de planta basilical de la Biblioteca del papa Agapito I (535-536). Recientes excavaciones han sacado a la luz un área destinada a la sepultura justo en correspondencia con el canalillo de desagüe que corre por el pavimento del Aula.

Saliendo por el portal del siglo XVII de la Biblioteca, después de haber bajado unos cincuenta metros por el Clivo de Scauro, se llega al sector arqueológico que está debajo de los tres Oratorios. Nos encontramos ante una estructura perfectamente conservada que nos permite visitar dos lugares especiales de la Roma imperial formado por Tabernas de los siglos II y III d. de C. con entrada en el Trium Ararum, antigua calle, hoy no es visible, que desembocaba en el Clivo de Scauro.

Tal vez parezca insólito, pero el complejo artístico de lo tres Oratorios y sus áreas arqueológicas, aunque se halla en la zona del Monasterio de San Gregorio en el Celio, fue cedido en 1928 por el papa León XII al Cabildo de la Basílica patriarcal de Santa María la Mayor de Roma.


Dirección:
Rettoria di Sant'Andrea al Celio
Piazza San Gregorio n°2
00184 ROMA
Teléfono +39  06 70494966

 
 

© 2006 Basilica Papale Santa Maria Maggiore.