Esta mañana, a las 11:00 horas, en la Oficina de Prensa de la Santa Sede, ha tenido lugar la Conferencia de presentación del nuevo documento del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, titulado "Dar lo mejor de uno mismo". “Sobre perspectiva cristiana del deporte y de la persona humana ".
Han intervenido el cardenal Kevin Farrell, Prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, Antonella Stelitano, investigadora, miembro de la Sociedad Italiana de Historia del Deporte, Patrick Kelly, S.I., Profesor Asociado de Teología, Universidad de Seattle, EE. UU ySantiago Pérez de Camino, Responsable de la Oficina Iglesia y Deporte del Dicasterio.
Estaban también presentes algunos colaboradores y expertos del mismo Dicasterio que han contribuido a la revisión del documento y concedieron entrevistas en diversos idiomas; en italiano, el Sr. Daniele Pasquini, Presidente de CSI Roma, en francés y alemán el Prof. Dries Vanysacker, Profesor de Teología en la KU Leuven en Bélgica, en portugués y español Alexandre Borges de Magalhaes, escritor y coordinador general del Movimiento de Vida Cristiana en Perú y en inglés Manoj Sunny, ex atleta olímpico en India y fundador del Movimiento Jesus Youth.
Sigue la intervención del cardenal Kevin Farrell
Presentación del cardenal Kevin Farrell
Hoy estamos aquí para presentar el documento del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, -que tengo el honor de presidir- sobre la perspectiva cristiana del deporte y la persona humana, junto con el Mensaje que el Papa Francisco ha dirigido a todos los amantes del deporte con motivo de la presentación de este texto. Doy las gracias en primer lugar al Santo Padre por sus palabras y a todos aquellos que han colaborado con disponibilidad y competencia en la revisión del documento, algunos de los cuales están aquí presentes.
El documento se remonta a un proyecto ya iniciado por el entonces Consejo Pontificio para los Laicos, al que san Juan Pablo II había confiado la tarea de ser un punto de referencia para las organizaciones deportivas a nivel internacional y nacional y sensibilizar a las iglesias locales acerca de la atención pastoral en los ambientes deportivos.
El documento que presentamos no pretende responder a todas las preguntas y desafíos que plantea hoy, el mundo del deporte: quiere "contar" la relación entre el deporte y la experiencia de la fe y ofrecer una visión cristiana de la práctica deportiva.
El título "Dar lo mejor de uno mismo" se refiere al discurso que el Papa Francisco dirigió a las asociaciones deportivas el 7 de junio de 2014 en la Plaza de San Pedro, con motivo del setenta aniversario del Centro Deportivo Italiano. Sin embargo, la expresión también fue utilizada por el Santo Padre en otras ocasiones, como durante la reunión con los jóvenes participantes en la reunión pre-sinodal en abril pasado: "Venís de muchas partes del mundo y traéis con vosotros una gran variedad de pueblos, culturas y también religiones: no todos sois católicos y cristianos, ni siquiera sois todos creyentes, pero ciertamente estáis animados por el deseo de dar lo mejor de vosotros mismos ". Y, dice así en la exhortación apostólica Gaudete et Exsultate: "Lo que interesa es que cada creyente discierna su propio camino y saque a la luz lo mejor de sí, aquello tan personal que Dios ha puesto en él" (n. 11).
"Dar lo mejor de uno mismo" es, sin duda, una expresión que se aplica tanto en el ámbito del deporte como en el de la fe. Efectivamente, por un lado, recuerda el esfuerzo, el sacrificio que un deportista debe asumir como una constante en su vida para obtener una victoria o simplemente para alcanzar la meta. Pero también en el ámbito de la fe, estamos llamados a dar lo mejor de nosotros mismos para alcanzar la santidad, que, como ha subrayado el Papa en Gaudete et exsultate, es una llamada universal, dirigida a todos, incluidos los deportistas. No es coincidencia que el Santo Padre en el Mensaje que acompaña este documento escriba que "el deporte puede ser un instrumento de encuentro, formación, misión y santificación".
También me gustaría resaltar que este es el primer documento de la Santa Sede sobre el deporte. Si bien es cierto, que hay discursos y mensajes de varios Papas dirigidos al mundo del deporte y que la Santa Sede ha organizado no pocas conferencias sobre este argumento, no había todavía ningún documento que recogiera el pensamiento y los deseos de la Iglesia Católica relacionados con el deporte, tanto profesional como amateur.
El documento está estructurado en cinco capítulos: La relación entre la Iglesia y el deporte (capítulo 1); una descripción del fenómeno deportivo con una mirada atenta a la persona humana (capítulos 2 y 3); algunos de los desafíos actuales que el deporte debe afrontar (capítulo 4); la Iglesia y la pastoral del deporte (capítulo 5).
Asimismo me gustaría llamar la atención, para una lectura clave del documento, sobre las muchas citas del Magisterio acerca del deporte desde el Papa Pío X al Papa Francisco. Son citas tomadas de discursos, saludos y homilías que indudablemente podrían contribuir a desarrollar la pastoral del deporte con respecto a su promoción y formación.
Concluyo, subrayando el carácter divulgativo y pastoral del documento. No es un texto para los estudiosos o investigadores, sino una reflexión sobre el estado actual del deporte a la que se agregan indicaciones y sugerencias que, sin duda, servirán no sólo a las conferencias y a las diócesis para poner a punto una pastoral del deporte, sino también a los clubs amateurs, a las asociaciones de aficionados y a los mismos atletas para reflexionar sobre la vida cristiana y la forma de practicar deporte.