El Santo Padre se ha reunido hoy en la Nunciatura Apostólica de Santiago de Chile, después del almuerzo, con un pequeño grupo de víctimas de abusos sexuales por parte de sacerdotes. El encuentro ha tenido lugar de forma estrictamente privada y no había nadie más presente: solamente el Papa y las víctimas. De este modo, han podido contar sus sufrimientos al Papa Francisco, que les ha escuchado, y ha rezado y llorado con ellos.