Los representantes pontificios, es decir los miembros de la diplomacia vaticana, que se han reunido con el Papa Francisco en Roma del 15 al 17 de septiembre para celebrar el Jubileo de la Misericordia, al final de su encuentro han dirigido un fuerte llamamiento “a la Comunidad Internacional y a cuantos tiene responsabilidades de gobierno para que actúen todavía con más eficacia para detener la violencia y resolver pacíficamente los conflictos en diversas partes del mundo”.

Igualmente expresan “solidaridad a todas las víctimas inocentes y a cuantos padecen discriminaciones y persecución con motivo de su fe religiosa y elevan por ellos oraciones al Padre de toda misericordia”.