La Oficina de Prensa de la Santa Sede informa en un comunicado de la institución de un comité encargado de la distribución de los fondos recaudados con la colecta convocada por el Papa para Ucrania.

“Como se recordará, a raíz de los trágicos acontecimientos bélicos ocurridos en el este de Ucrania -dice el texto- el Santo Padre Francisco promovió una acción humanitaria en favor de las poblaciones afectadas, allí residentes o refugiadas en otras partes del país, denominada como "el Papa por Ucrania ".

Para apoyar dicha acción, el Papa ofreció su contribución personal y convocó una colecta, llevada a cabo el domingo 24 de abril en todas las Iglesias católicas de Europa, cuya recaudación está destinada "exclusivamente para el beneficio de la población víctima de la guerra, sin distinción de religión, fe o pertenencia étnica ".

Para la distribución de dichos fondos, el Papa ha decidido establecer in loco un Comité técnico compuesto por un presidente y cuatro miembros, como resulta de la carta enviada recientemente por el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado al obispo Ene Sobilo, auxiliar de Kharkiv-Zaporizhia, nombrado al mismo tiempo Presidente de dicho Comité.

La designación de los otros miembros corresponde al Presidente, excepto la de uno de ellos que será indicado, de común acuerdo, por "Caritas Internationalis" y por el Pontificio Consejo "Cor Unum". El mandato del Comité durará un año, renovable si es necesario. Su sede será la curia de la diócesis de Kharkiv-Zaporizhia y los operadores que actuarán en nombre del Comité -en la sede central o sobre el terreno - serán voluntarios, para que de los fondos recaudados se beneficien efectivamente las poblaciones afectadas.

La carta del cardenal da indicaciones importantes sobre la elección de las intervenciones que se lleven a cabo: las propuestas deben proceder, ante todo, “ de las asambleas interreligiosas o interconfesionales existentes en cada una de las zonas, o de los obispos, incluso los no católicos, donde no haya este tipo de asambleas", pero también se podrán examinar las propuestas de otras organizaciones.

Puesto que se trata de una iniciativa personal del Papa, los últimos referentes del proyecto son la Secretaría de Estado y el Pontificio Consejo "Cor Unum", a través de la nunciatura apostólica en Ucrania, mientras que la supervisión "técnica" de su implementación correrá a cargo de Cor Unum.