CONSEJO PONTIFICIO PARA LA PROMOCIÓN DE LA NUEVA EVANGELIZACIÓN

"La Iglesia oraba incesantemente a Dios" (Hechos 12:5)

Rosario con el Santo Padre

31 de mayo de 2021

El próximo lunes, 31 de mayo, el Papa Francisco concluirá el mes de oración para invocar el fin de la pandemia y la reanudación de las actividades laborales y sociales rezando el Rosario en los Jardines Vaticanos a las 17:45 horas. El Papa comenzó el mes de mayo con una oración ante el icono de la Virgen del Socorro en la basílica de San Pedro, y posteriormente una treintena de santuarios de todo el mundo continuaron con el "maratón" de oración de consuelo y esperanza. La iniciativa, por deseo expreso del Santo Padre, fue organizada por el Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización. Durante este mes de oración han llegado muchos testimonios de gran participación de todo el mundo, tanto de numerosos santuarios como de parroquias y asociaciones, que han involucrado a la gente y a los obispos locales.

La iniciativa ha sido muy apreciada por su sencillez y al mismo tiempo por el profundo sentido de comunión con la Iglesia y con el Papa Francisco. Siguiendo las retransmisiones en directo a través de los medios de comunicación, ha sido posible para millones de personas rezar el Rosario cada día a la manera de cada cultura y país. Las diversas culturas tiñeron de color la oración que ha manifestado la solidez de la fe de las comunidades cristianas de todo el mundo. Desde la sencillez del Santuario de Nuestra Señora de Lourdes en Nyaunglebin, en Myanmar, hasta la solemnidad de Nuestra Señora de Montserrat, en España, pasando por la gran participación popular en los santuarios de África, India y Corea. Estos son sólo algunos ejemplos significativos del entusiasmo con el que se ha recibido esta iniciativa.

Como signo final, el Papa Francisco ha querido dirigir su oración a una imagen de la Virgen de la que es muy devoto, la Virgen María que deshace los nudos. El icono con esta particular representación de la Virgen se encuentra en Augsburgo (Alemania). Se trata de una pintura al óleo sobre lienzo del pintor alemán Johann Georg Melchior Schmidtner realizada hacia 1700 y que actualmente se encuentra en la iglesia de St. Peter am Perlach. El Papa Francisco siempre ha tenido una gran devoción por esta imagen y ha difundido su culto especialmente en Buenos Aires y Argentina. El cuadro representa a la Virgen intentando deshacer los nudos de una cinta blanca sostenida por dos ángeles, rodeada de escenas bíblicas que remiten simbólicamente a imágenes de esperanza, misericordia y victoria sobre el mal.

Una copia única del icono original conocido en toda Baviera con motivo de una peregrinación de las diócesis bávaras a Augsburgo, celebrada en el año 2015, llegará a Roma acompañada por el obispo de Augsburgo, S.E.R. Monseñor Bertram Johannes Meier, que se la regalará al Papa Francisco quien la destinará según sus intenciones. La elección de esta imagen quiere representar una oración especial para que la Virgen interceda para " deshacer " los sufrimientos que atenazan al mundo en esta época de crisis sanitaria, pero también económica, psicológica y de relaciones sociales.

El Papa Francisco encomienda a la Virgen cinco intenciones de oración, cinco "nudos" a deshacer, para alimentar la esperanza en los seres humanos. El primer nudo es el de las relaciones heridas, la soledad y la indiferencia, que se han hecho más profundas en este tiempo. El segundo nudo es el del desempleo, con especial atención al desempleo juvenil, al femenino, al de los padres de familia y al de los que intentan defender a sus empleados. El tercer nudo es el del drama de la violencia, en particular la que se origina en la familia, en el hogar dentro de las paredes de la casa, hacia las mujeres o se deflagra en las tensiones sociales generadas por la incertidumbre de la crisis. El cuarto nudo es el del progreso humano, que la investigación científica está llamada a apoyar, poniendo en común los descubrimientos para que sean accesibles a todos, especialmente a los más débiles y pobres. El quinto nudo a desatar es el de la pastoral para que las Iglesias locales, las parroquias, los oratorios, los centros de pastoral y de evangelización recuperen el entusiasmo y el nuevo impulso en toda la vida pastoral, y que los jóvenes puedan casarse y construir una familia y un futuro.

La celebración del Rosario comenzará con una procesión solemne, encabezada por el obispo de Augsburgo, que llevará el icono a un lugar panorámico de los Jardines Vaticanos, que para la ocasión se convierte en un verdadero santuario al aire libre. El Papa y los fieles estarán ante una perspectiva única. Podrán contemplar juntos, la cúpula de San Pedro que parece iluminar y proteger la ciudad de Roma, símbolo de todas las ciudades del mundo. Acompañarán a la procesión los niños que han recibido la Primera Comunión de la parroquia de Santa Maria della Grotticella de Viterbo, que ha sido la primera en Italia en poner a disposición de un Centro de Salud sus locales para instalar un centro de vacunación, los chicos y chicas confirmados en la parroquia de Santo Domingo de Guzmán, un grupo scout de Roma, algunas familias y algunos religiosos que representan a todo el pueblo de Dios. Los jóvenes de la Asociación SS. Pedro y Pablo llevarán el icono de la Virgen, con la Guardia Suiza y la Gendarmería Vaticana como guardia de honor. La procesión estará animada por el coro de la diócesis de Roma y la Banda de Arcinazzo Romano. Se unirán a la oración los jóvenes de Acción Católica, algunas familias compuestas por recién casados o que esperan un hijo y una familia de personas sordas en la que ha nacido una vocación religiosa. Al final de la celebración tendrá lugar la ceremonia de coronación de la imagen de la Virgen, con una preciosa corona realizada por los joyeros  Hermanos Savi. La oración se retransmitirá en directo por los canales oficiales de la Santa Sede, se conectarán todas las redes católicas del mundo y será accesible para las personas sordas y con problemas de audición a través de la traducción a la lengua de signos italiana LIS. Conectado a Roma habrá un grupo de santuarios donde se rezará el rosario junto al Papa Francisco.  Los santuarios son: Notre-Dame de Boulogne en Nanterre, Francia, Nuestra Señora de Schoenstatt en Vallendar, Alemania, Nuestra Señora de los Dolores en Kibeho, Ruanda, Santuario Nacional de Maipú en Santiago, Chile, Nuestra Señora de Os Gozos en Ourense, España, santuario de Nuestra Señora de Lourdes en Carfin, Escocia,  basílica santuario Virgen de los Milagros de Caacupé, Paraguay y santuario parroquial de Nuestra Señora de la Salud en La Spezia, Italia.